Como lo define la ISO 9001 del sistema de gestión de calidad, las partes interesadas son los grupos de interés que pueden verse afectados por la actividad o decisiones de una empresa. Por ello, es necesario identificar de manera pertinente a quienes son considerados los stakeholders internos y externos de una organización.  Es muy común creer que las únicas personas que violan la normatividad en las empresas son los representantes de esta o sus altos funcionarios. Sin embargo, es preciso recordar que cualquier persona que realice una transacción irregular viéndose beneficiada de esta y perjudicando el patrimonio de la empresa, es penalmente responsable. Actualmente las grandes corporaciones que están implementando este tipo de programas antisoborno, anticorrupción y de prevención del delito, extienden sus políticas a las partes interesadas involucradas en el negocio de la sociedad, de esta manera, invitan no solo a sus empleados (stakeholder interno) a cumplir con códigos de conducta y ética, sino que estas alcanzan a socios externos que son parte de la relación productiva, como proveedores, gobierno, servicios, clientes y comunidades aledañas (stakeholder externo). Si el programa de cumplimiento normativo tiene tal alcance, quiere decir que la matriz de identificación de las partes interesadas ha sido correctamente elaborada.

​

 

Gobierno

 

Cumplir la normatividad legal frente a los diferentes niveles de gobierno es uno de los preceptos básicos a seguir para mantener en orden el funcionamiento de la empresa. Aquí no solo hablamos de los permisos y autorizaciones que se deben gestionar para que la compañía esté legalmente establecida (predial, licencia de funcionamiento, empadronamiento, permiso de protección civil, etc.), si no también del cumplimiento de las obligaciones propias del tipo de negocio; por ejemplo, según el tipo de industria a la que pertenece y sus obligaciones con instancias medioambientales y sanitarias; si es exportador o importador, tener las certificaciones correspondientes a su giro; cumplir el pago de derechos y aplicación de retenciones sobre nóminas; pagar puntualmente impuestos, etc. Es importante mencionar que cualquier tipo de incumplimiento es automáticamente causa de riesgo.

​

 

Proveedores, Servicios y Clientes

 

Mantener la ética en los negocios es otro aspecto básico en los programas de Compliance. Regularmente se establece por escrito (mediante políticas) el tipo de relación comercial que se espera entre los socios. Si bien, por sentido común, no debiera ser necesario indicar explícitamente que está prohibido recibir o dar sobornos para otorgar o cerrar negociaciones, la mayoría de los países establecen criterios de ética empresarial para controlar el tipo de gratificaciones que, por voluntad propia, los socios ofrecen para agradecer la relación comercial. Dichas políticas pueden ser tan estrictas como lo marque la propia corporación y tan flexibles como lo requieran los usos y costumbres de la región.

 

​

​

​

Empleados

 

Paralelamente, las políticas de cumplimiento legal no son exclusivas de las relaciones externas de la empresa, también son necesarias internamente para controlar la observancia de las normas que ayudan a eliminar vicios y malas prácticas que afectan la integridad y la imagen de la compañía. Básicamente están enfocadas en prevenir riesgos pero también a proteger a los empleados en sus diferentes funciones, quienes a su vez, forman parte integral del funcionamiento y operación de la organización. Son socios del negocio, y como tal, son corresponsables del cumplimiento normativo. Por lo que, su constante concientización y cooperación en el buen desempeño de sus actividades los hace partícipes día con día de una cultura de vivir en la normatividad y transparencia. 

​

 

 

Comunidad

 

Si bien la comunidad (entorno donde se establece la empresa y/o la que se beneficia por el objeto de la sociedad) no está implícitamente incluida en la operación del negocio, es un agente que, nuevamente, se beneficia (o se perjudica) por el buen funcionamiento del negocio. Por ejemplo, si la empresa trabaja con cualquier tipo de sustancias químicas, está obligada a dar un tratamiento adecuado a sus residuos y así evitar dañar el medio ambiente que forma parte de la comunidad donde se ubica. En gran medida, estas acciones de control y compromiso se atribuyen al lado socialmente responsable de la empresa, pero no son las únicas. También hay otras prácticas de las cuales no todos los agentes están enterados, pero que tiene que ver con proporcionar un beneficio a la comunidad (carreras, concursos, reforestación, etc).